jueves, 26 de junio de 2008

Del diario de Bridget Jones y unas pedradas al sapo

Hace unos años vi en el cine la película que da título a este post “El diario de Bridget Jones”, salí de la sala con dolor de estómago de la risa. Tendría unos 24 por aquel entonces y el concepto de “solterona” no pasaba por mi mente, aunque por el de algunas de mis amigas sí, lo cual me parecía realmente patético, ¿quedarse a vestir santos? ¿para qué? si puede uno desvestirlos con tanta facilidad. Curiosamente ahora que soy soltera por segunda vuelta, las recuerdo y comienzo a comprenderlas un poco.

En estas semanas me ha estado rondando por la cabeza la vida de la protagonista de esta cinta, con una preocupante dosis de identificación que, en serio, no me gusta nada: mujer soltera de 32 años que un buen día se da cuenta de que no quiere morir sola, mientras visualiza la imagen de su cadáver devorado por lobos, que no son lobos sino pastores alemanes. Es entonces que decide cambiar de vida y realizar lo necesario para encontrar a la pareja ideal: bajar de peso, fumar y beber menos, y por sobre todo no perder el tiempo saliendo con patanes que cayeran en las siguientes categorías: “alcohólicos, trabajohólicos, incumplidores, cabrones, insensibles o pervertidos” (yo agregaría losers, casados, machos y ególatras-vanidosos), poniendo un especial cuidado en no enamorarse o ilusionarse con cualquier sujeto que encarnase estas (comunes) características…

Parece fácil hasta que un mega bisquet, evidentemente patán, pero wapo en exceso flirtea con ella, es aquí donde llega una de mis partes favoritas de la película…Bridget, sabiendo que es una tontería completamente opuesta al propósito descrito en el párrafo anterior, corresponde al coqueteo, manifestando estar muy segura de que no caerá en la tentación de hacerse ilusiones, piensa esto mientras tararea la marcha nupcial y se imagina frente al pastel de bodas al lado del atractivo y a todas luces pervertido pretendiente.

En cuanto a relaciones se refiere creo que mientras más años tienes, más complicado se pone todo. Por un lado si te pones muy exigente (excluyente) puedes pasar meses sin salir (besar a) con alguien, lo cual puede resultar de pronto aburrido y me atrevo a afirmar que hasta poco saludable, pero por otra parte qué pasa si te pones a lo B.Jones y acabas entusiasmándote con un chico que no está a la altura de tus expectativas y que además acaba tratándote como una basura justo cuando se da cuenta que comienzas a ilusionarte. Cuando pienso en esto me aterroriza padecer el síntoma inequívoco de la urgidez: imaginarme a mí misma frente al pastel de bodas cada vez que conozco a un chico…

No dejaré de salir con chavos que me agraden mientras esté soltera, me gusta conocer personas, además me gusta también la vida en pareja y definitivamente, si es algo que deseo, tengo que ponerme en el camino que me lleve a lograrlo y si eso incluye llevarme algunos descalabros con alguno que otro Don Juan, correré el riesgo. Aún así activaré una alarma que titularé BJ, para que cuando me esté acelerando en mis imaginaciones ponga los pies en la tierra y vuelva a mi convicción de que es mucho mejor la soledad a las malas compañías. ¿Cuántos sapos tendré que besar antes de encontrar al príncipe?...o la pregunta será ¿cuántos príncipes se convertirán en sapos una vez que sean besados?...

Aquí les comparto el que espero sea el último pastel imaginado a lo menso…


4 comentarios:

::júbilo::haku:: dijo...

por otro lado, creo que uno, mas grande, sabe lo que quiere...

Semilla dijo...

júbilo: yo no estoy segura de saber lo que quiero, pero veo con claridad lo que no quiero...algo es algo no???

Diego Herrera dijo...

Es muy válido no saber lo que uno quiere en la vida, pero cuando sabes qué No quieres, las nubes se abren y bajan rayitos como en las películas, neta!

Es curioso como también los hombres tenemos temores y espectativas similares (pero muchos no se atreven a decirlo)

Con eso de tu "convicción de que es mucho mejor la soledad a las malas compañías" me recuerdas tanto a alguién... :D

Semilla dijo...

Diego: a quién te recuerdo??

no hubiera imaginado que chicos fueran los que comentaran el post...chicas, qué opinan?